Libera a tu empresa del caos y de las plataformas rígidas
De verdad necesitas otro año más organizando la planificación de la formación con excels, correos y un software estándar que te obliga a trabajar “como ellos dicen”?
La planificación de la formación para 2026 no debería sentirse como una obligación administrativa, sino como una ventaja competitiva. Sin embargo, muchas empresas siguen atrapadas en sistemas que limitan su capacidad de evolucionar.
La pregunta clave es simple:
¿Quieres que te digan cómo tienes que trabajar o quieres gestionar la formación como tú decidas?
2026 será un año marcado por la transformación digital de los equipos, la automatización y la necesidad de desarrollar habilidades críticas en todos los niveles. El problema no es la formación. El problema es cómo la gestionas. Y aquí es donde la tecnología adecuada puede liberar, o encadenar, a un departamento de RRHH.
El problema real: planificar la formación sin control, sin datos y sin flexibilidad
Planificar la formación no es hacer una tabla con cursos y fechas. Planificar la formación implica:
- Detectar necesidades reales.
- Priorizar competencias críticas.
- Ajustar presupuestos.
- Coordinar áreas y agendas.
- Hacer seguimiento en tiempo real.
- Medir el impacto real en el negocio.
El desafío es que la mayoría de empresas siguen gestionando el proceso de formación con herramientas que no fueron diseñadas para ellas.
Los síntomas de una gestión ineficiente son conocidos:
- Calendarios imposibles de actualizar.
- Versiones de Excel circulando entre responsables.
- Falta de trazabilidad sobre quién realizó qué formación.
- Cero integración con desempeño, onboarding o clima.
- Informes que llevan días… cuando deberían estar listos en un clic.
Y cuando hay una plataforma de formación estándar, el escenario no mejora mucho. Modos de trabajo rígidos, procesos que no encajan con la empresa, limitaciones para personalizar flujos, y el clásico “para eso necesitas contratar un módulo adicional”.
Así es muy difícil que la formación para empleados/as se convierta en un motor estratégico. Por eso, en lugar de adaptar tu empresa a un software, tiene mucho más sentido crear un sistema de formación que se adapte a tu empresa.
Cómo debería planificarse la formación en 2026 (si no tuvieras limitaciones)
Piensa por un momento en cómo sería gestionar la formación si tuvieras libertad total para diseñar tu propio sistema. La planificación de la formación fluiría en cinco pasos claros:
1- Detectar necesidades con datos, no con intuiciones
La empresa debería poder analizar:
- Resultados de evaluaciones de desempeño.
- Competencias críticas por puesto.
- Objetivos estratégicos del negocio.
- Feedback de responsables.
- Históricos de formaciones anteriores.
Imagina tener un panel que agrega todas estas fuentes en tiempo real, sin recopilar manualmente la información. Esa es la diferencia entre reaccionar y planificar la formación.
2- Priorizar lo que importa
No todas las formaciones tienen el mismo impacto.
Un buen sistema de gestión de formación debería permitir clasificar el plan en:
- Formación obligatoria.
- Formación estratégica.
- Formación técnica por áreas.
- Desarrollo individual.
- Reciclaje o actualización.
Y visualizarlo de forma clara: quién lo necesita, cuándo y por qué.
3- Crear un plan ágil, vivo y fácil de actualizar
La planificación de la formación nunca es definitiva. Cambian las prioridades, los equipos y los recursos. 2026 exige un modelo vivo, no un documento estático.
4- Ejecutar el plan sin carga administrativa
El sistema ideal te haría estas cuestiones de forma automática
- Inscripciones.
- Comunicaciones.
- Recordatorios.
- Aprobaciones internas.
- Certificados.
- Integración con la jornada, vacaciones o sistema de nómina.
Si RRHH sigue haciendo esto manualmente, la planificación de la formación nunca escalará.
5- Medir impacto para demostrar valor
No solo medir asistencia. Medir impacto real:
- ¿Qué equipos mejoraron su rendimiento?
- ¿Qué formación redujo errores o incidencias?
- ¿Qué acciones contribuyeron a los objetivos del negocio?
- ¿Qué competencias se fortalecieron de manera demostrable?
Cuando la gestión de la formación demuestra retorno, deja de verse como un gasto. Esto es lo que debería ser un plan de formación moderno. Y sí, es 100% posible… si la tecnología no se convierte en un obstáculo.
¿Por qué las plataformas estándar no funcionan para la planificación de 2026?
La mayoría de softwares de formación fueron diseñados para ser “todo para todos”. ¿El resultado? Procesos genéricos para empresas que no son genéricas.
Estas son las limitaciones habituales del software de RRHH estándar:
- No permiten gestionar tu flujo de aprobación tal y como lo necesitas.
- No integran desempeño, onboarding, clima o ausencias.
- No es posible crear métricas personalizadas.
- Forzan una estructura fija de planes, cursos y participantes.
- No permiten automatizar procesos propios de cada departamento.
- Requieren pagar licencias por usuario/a que crecen sin control.
En otras palabras: te obligan a trabajar como ellos decidieron que deberías trabajar. Y si 2026 va a ser un año clave para el desarrollo del talento, tiene poco sentido encadenarte a una herramienta que te limita la gestión de la formación.
La alternativa inteligente: un sistema de formación hecho a tu medida
Aquí es donde Apptitudinal cambia el tablero. No te ofrecemos un “software de formación”. Te ofrecemos tu propio sistema de formación, diseñado exactamente como lo necesitas y creciendo contigo.
Sin licencias por usuario/a, sin restricciones, sin procesos prediseñados. Un sistema de gestión de formación que hace lo que tú decides, no lo que un proveedor impone.
¿Qué puedes conseguir con un módulo de formación creado en Apptitudinal con tecnología low-code?
- Diseñar tu plan anual con tus categorías, prioridades y métricas.
- Vincular necesidades formativas con desempeño, clima u objetivos.
- Automatizar inscripciones, notificaciones y aprobaciones internas.
- Controlar en tiempo real asistencia, progreso e impacto.
- Integrar proveedores externos, modalidades y presupuestos.
- Crear dashboards con KPIs personalizados para tu comité directivo.
- Incorporar workflow de inscripción para empleados/as y managers.
- Gestionar la formación desde una app móvil accesible para toda la empresa.
- Descargar informes sin esperar días ni pedir soporte técnico.
Y, lo más importante: cada empresa tiene su propia versión. Porque cada empresa trabaja de forma diferente.